viernes, 25 de abril de 2014

Las invitaciones y recordatorio de un Bautizo especial





Tengo varios proyectos pendientes de enseñaros que por una cosa u otra no he podido subir en su momento, así que poco a poco iré subiendo algunos trabajos que hemos estado realizando. 


Hoy os traigo la primera de las entradas relativas a un bautizo muy especial. Es habitual en los tiempos que corren, que muchas mamas y papas decidan posponer la celebración del bautizo a una época del año en que haga menos frío, luzca más el sol, y todo resulte más veraniego o primaveral. Sin embargo, esta celebración se realizó en el mes de Noviembre, y sin embargo, no por ello quedó deslucida. Solemos tender a imaginarnos las celebraciones especiales al aire libre, o rodeados de flores primaverales, pero hay celebraciones invernales que no pierden el encanto a pesar del frío. 

La entrada de hoy está dedicada a las invitaciones y recordatorios que realizamos para la celebración. 
Como es habitual en nosotros, empezamos a pensar en la gama de colores que queríamos utilizar. Algo sencillo, pero elegante, dulce sin caer en lo cursi ni recargado. Se trataba de una niña, de modo que nos decantamos por los tonos beige-tierra-marrones, combinándolos con los tonos que van del rosa palo hasta el cereza. Sin duda un acierto que encantó a todo el mundo. 


Ya que estamos con la paleta de color, se nos ocurrió alejarnos de la típica invitación de toda la vida, y quisimos hacer algo un poco distinto. Jugando con la paleta de color, nos dimos cuenta que sería divertido hacer una invitación con forma de carta de color, a modo de las que usan los pintores al elegir el color de las casas, o las "pantoneras" que utiliza la casa Pantone para definir y denominar los colores. 

El resultado sería una invitación con forma de carta de color, en la que cada parte tendría un tono de los elegidos, de las dos gamas de colores que utilizaríamos para todo el evento.  

No nos suelen gustar mucho los diseños "DemasiadoInfantilesRozandoLoÑoño" de modo que buscamos algo que simbolizara el bautizo, alejándonos un poco de los diseños muy infantiles, y nos decantamos por utilizar un angelote, que estaría presente en todos los detalles. 

Para ello, creamos un sello con el diseño del angelote, y lo utilizamos para personalizar múltiples detalles de la celebración. 




Además, la ceremonia se celebraría en una Basílica preciosa de la ciudad, con mucha historia, de modo que incluimos un poco de ella en la invitación que se montó sobre papel de acuarela y utilizamos un grabado de la Basílica como primer diseño de nuestra peculiar carta de color.

Jugamos también con unas fotos de recién nacida de la protagonista, de modo que cada tarjeta que formaba la invitación combinaba, además de la gama de colores, los datos de la celebración así como fotos de la pequeña.




El sello del angelote, simbolizando el bautismo, sin duda nos dio mucho juego y lo utilizamos en distintos tamaños y distintas tintas para que contrastara con el fondo en cada caso concreto.



Al final de la invitación, pusimos la carta de color utilizada, y se entregaron en bolsitas craft blancas, con el sello del angelote en color cobre.

El conjunto se acompaño de unas etiquetas de pasta de sal que realizamos, utilizando el sello del angelote, y algunas invitaciones también se entregaron en cajitas craft, con el sello del angelote en tinta blanca.






Por último, los recordatorios.




































Los realizamos en dos piezas, combinando tonalidades de la gama de colores elegida y uniendo las dos piezas con ayuda de un lacito a juego. El resultado, estos originales recordatorios en rosa y cereza.







Espero que os hayan gustado tanto como a nosotros!